El lenguaje según Chomsky: Explicación y críticas

ResearchBlogging.orgHay en la historia de la Psicología (en la historia de su construcción como una ciencia natural) ciertos hitos que representan los momentos de más drástico cambio. Así sucedió cuando la tradición europea psicoanalítica se sustituyó por la norteamericana, conductista y positivista a machamartillo, y también cuando esta última fue golpeada por la primera ola cognitiva moderna. Aunque la transición del conductismo al cognitivismo en los años 50-60 del siglo pasado no fuera tan violenta y brusca como le habría gustado a Thomas Kuhn, no es menos cierto que a partir de aquel momento, sobre todo mediante la importación de la metáfora del cerebro-ordenador, la psicología se convirtió en una disciplina muy diferente, para bien o para mal. Uno de los responsables, o al menos uno de los estudiosos que aportó más impulso a ese cambio, fue el lingüista Noam Chomsky, precisamente recordado por su agresiva crítica al trabajo de B. F. Skinner acerca de la conducta verbal ("Verbal Behavior").
Las tesis de Chomsky acerca del lenguaje, particularmente acerca de su adquisición y producción temprana, calaron en todos los ámbitos de la psicología (psicolingüística, pensamiento, terapia, etc.) y sonaron con ecos revolucionarios, obligando a guardar en el cajón de los trastos viejos a todas las aportaciones anteriores: la lengua no es una invención cultural, sino un instinto, o si se prefiere un órgano, un fruto de la naturaleza.
Han pasado varias décadas desde entonces. Quienes se han embarcado en la tarea de hacer un balance, de calcular cuánto nos aporta realmente a los psicólogos la lingüística chomskyana, ya tienen su veredicto, y desde mi punto de vista no ha sido favorable. No obstante, como tuve la oportunidad de comprobar recientemente, la aportación de Chomsky a la psicología, y sobre todo en lo tocante al lenguaje (la formación de Chomsky era en lingüística y filosofía), sigue muy vigente entre quienes hoy en día investigan en estos campos. Así pues, ¿qué tiene de atractivo la lingüística según Chomsky? Y también, ¿qué tiene de equivocado, según los que vemos con crítica sus teorías? Lo contaré en este post, que será necesariamente largo (espero que no muy aburrido).

¿No os recuerda a algo...otra vez?

Sí, vuelvo a la carga con una segunda entrada de vídeos de animales. Y es que los perros no son los únicos que saben escapar cuando se les encierra.

Sino que se lo digan a este fenómeno, que en un momento se monta una fuga digna de un oscar.



Uno no deja de sorprenderse con los animales. No saben nada los muy pillos. Pero si este vídeo era sorprendente, no lo es menos este otro.



Estos animales saben hacer de todo. Pero puede que lo más impresionante esté por ver en este otro vídeo. En el mismo podemos ver a un perro que "sabe sumar". Es un vídeo del programa "Tú sí que vales" de tele 5. Y sí, en el mismo aparece un perro que realiza operaciones aritméticas...o eso parece. Desde luego dicho perro impresiona bastante al jurado. Pero, ¿realmente sabe sumar? ¿No os recuerda de nuevo a algo ya conocido? Volvemos de nuevo al estupendo artículo de Fernando...

"A finales del S. XIX y principios del S. XX, eran comunes este tipo de "fenómenos de feria" ambulante. "Clever Hans", o "Hans el listo", se convirtió en uno de los caballos más populares del mundo, recorriendo los pueblos en la compañía de su dueño y amaestrador, a quien seguramente proporcionó dinero a espuertas. En una de sus concurridas actuaciones, una persona del público formulaba una operación matemática sencilla. Como "5 x 3", e inmediatamente el caballo respondía pisoteando el suelo con uno de sus cascos, a ritmo regular, hasta contar el número exacto de pisotones que respondían a la pregunta, "15" en este caso, lo cual maravillaba a los allí congregados. ¿Era posible que Hans, aun siendo un cuadrúpedo sin pedigrí, hubiese aprendido a multiplicar? ¿En qué lugar dejaba este portento equino a los miles de niños humanos que tenían problemas para memorizar las tablas de multiplicar?
Maravillas semejantes no podían sino poner la mosca detrás de la oreja a los científicos escépticos. Una investigación más rigurosa descubrió el pastel: el caballo no era, por supuesto, capaz de multiplicar, ni siquiera de sumar 2 y 2. El secreto residía en la mirada del amo, siempre atento a los rítmicos golpes de los cascos de su caballo durante "el cálculo". Cuando el número de golpes coincidía con la respuesta correcta, un simple y discreto gesto del amaestrador, como bajar la cabeza o desviar los ojos, servía como señal a Hans para que dejase de golpear el suelo y arrancase un asombrado "¡Oooh!" al público, que no daba crédito. El hecho de que los espectadores concentrasen sus miradas y su atención en los pies del caballo en vez de vigilar los sutiles movimientos del domador no hacía sino facilitar el ingenioso engaño.
Trucos de feria. No hay datos hasta nuestros días de cuadrúpedos capaces de dividir sin calculadora o de resolver integrales, pero, ¿acaso no es interesante en sí la complejidad del comportamiento implicado en este divertido engaño? Y, lo que es más importante, ¿qué mecanismos subyacen al aprendizaje de ese comportamiento? La respuesta, sorprendentemente, llegó cuando a un joven psicólogo le dio por encerrar gatos en cajas."

Para leer más, podemos acudir al artículo original de Fernando. El caso del caballo es un ejemplo clásico muy conocido, y es citado con frecuencia.
Y para terminar podemos ver "la final" del concurso, en la que podemos encontrar al mismo perro diciendo las horas de un reloj, y ladrando diferentes números escritos en una pizarra. Es un vídeo del mismo programa. Un perro muy listo...¿o no?

¿No os recuerda a algo?

Acabo de encontrarme unos vídeos estupendos en el blog Ciencia en el XXI, en una entrada llamada Inteligencia Canina. Me recuerdan muchísimo la caja-problema de Edward Thorndike. Sobre este famoso psicólogo estadounidense Fernando nos hablaba en esta otra estupenda entrada.


Nos comentaba también algo sobre el "otro gato" de la ciencia, el gato que tenía que solucionar la caja-problema del psicólogo. Citando a Fernando...

"Las cajas-problema se parecen a jaulas que cuentan con algún tipo de mecanismo que permite al minino encerrado en su interior abrir la puerta (por ejemplo, tirando de un cordón, o presionando una palanca). Una caja-problema es, en esencia, un laberinto como los que popularmente se utilizan para investigar el aprendizaje espacial con ratones, sólo que conceptualizado de otra manera: si en un laberinto el ratón tiene que aprender a hacer determinados giros en ciertos lugares para salir de su encierro, en una caja-problema de Thorndike el gato tiene que aprender a ejecutar determinados movimientos (tirar de una cuerda, golpear una palanca) para hallar la libertad y zamparse la merienda."

Podemos leer más en la entrada original. Decidme si no os recuerdan a algo estos vídeos que nos mostraba Eugenio en Ciencia en el XXI. Aquí tenemos uno de "Spider Perro"...



Y aquí otro en el que el perro además de escaparse agarra y libera a todos los demás...



Para ver el resto de los vídeos (son 5 en total) podemos acudir a la entrada original de Ciencia en el XXI: Inteligencia Canina. Que los disfrutéis ;)

Charles Yang y la gramática chomskyana

Tal día como ayer tuve la oportunidad de asistir a una charla organizada por Ikerbasque Foroa (fundación dedicada a atraer al sistema científico vasco a investigadores de prestigio mundial), en la que el invitado estelar fue el lingüista norteamericano Charles Yang, de quien yo no había sabido nada previamente. Debo descubrirme ante el currículum de Yang: doctorado en ciencias de la computación en el MIT, profesor de lingüística en Yale, multitud de publicaciones avalando su calidad como investigador... Tampoco me ahorraría buenas palabras para describir sus habilidades comunicativas, ya que realmente disfruté su conferencia. Sin embargo, mientras la presentación avanzaba, no podía evitar tener esa sensación de que me están contando algo ya familiar y discutido, incluso creo que en algún momento eché el cuerpo hacia adelante, moviendo la cabeza en un gesto negativo, sin darme cuenta. Como advirtieron mis acompañantes, mi posición acerca del contenido de la exposición era de escepticismo y crítica. Por supuesto, llegó el turno de intervención del público y un servidor asistió al habitual intercambio de preguntas y repuestas sin atreverse a participar. En parte por vergüenza, en parte por miedo a meter la pata... Tómese el presente post como una muestra más o menos representativa de lo que me pasaba por la mente mientras Yang exponía, y que no me aventuré a manifestar en público. Pero además, es una excusa fantástica para dar algunos apuntes sobre la gramática según San Chomsky, perdón, según Noam Chomsky, que sin duda os parecerá mucho más interesante que mis cavilaciones personales.

Los engaños de la publicidad

Dicen que una imagen vale más que mil palabras. En muchas ocasiones nos han dicho que la belleza de las personas que salen como portada de las revistas no es real. Que muchas veces, mediante aspectos tan sencillos como la iluminación, el maquillaje o el retoque digital, se cambia la imagen de las modelos.

Hace tiempo estuve hablando sobre el tema con una maquilladora profesional que había trabajado maquillando a las modelos y me contó su experiencia, y cómo se suelen retocar las imágenes que salen en portada. Seguramente este impresionante vídeo sirva para ilustrarlo. ¿Es el concepto que tenemos de la belleza poco realista?

Contra las adicciones, ¡Vacúnate!

Desde la psicología se trabaja en muchas ocasiones el tema de las adicciones. Y es que los problemas que causan las drogas, son fuente de estudio para neuropsicólogos y psicólogos sociales.
Aunque puede que otra buena forma de solución para las adicciones llegue de la mano de otras disciplinas. Un colaborador de Museo de la Ciencia es bioquímico e investigador en el campo de las vacunas, y ha escrito un post muy interesante sobre las adicciones. Como pienso que este tema puede ser de interés para los lectores de este blog, os dejo con esta estupenda explicación que nos hace sonicando sobre el asunto.

Contra las adicciones, ¡Vacúnate!

El título de esta entrada podría ser un cartel futuro, presente en un ambulatorio cualquiera. Igualito a los que inundan nuestros centros de salud cuando comienza la campaña de la gripe. Un cartel por el que muchas personas están luchando, para que cuanto antes existan vacunas para luchar contra ciertas adicciones.

Y el astuto lector se preguntará ¿qué tendrá que ver la profilaxis con drogas?¿que puede hacer una aproximación vacunal para frenar una adicción? ¿sonicando se ha vuelto loco y ha empezado a mezclar la velocidad con el tocino?

Os pido un voto de confianza, que lo bueno, no ha hecho más que empezar…

Sabemos que cuando un agente extraño penetra en nuestro organismo, es suceptible de que el sistema inmune lo detecte y lo elimine. Pero la mayoría de las drogas son demasiado pequeñas para ser reconocidas y pasan desapercibidas. Además, llegan en muy poco tiempo a los receptores neuronales que eficientemente desbaratan. Pero como siempre, alguien se empeñó en diseñar estrategias que solventaran los problemas. Alguien quería una vacuna y puso todo lo que pudo sobre la mesa, para intentar lograrlo.

En Little Rock, en la University of Arkansas for Medical Sciences, Michael Owens está intentando cambiar la terapia frente adicciones, luchando por el desarrollo de una vacuna frente a la metaanfetamina. Una vacuna que haga que en un futuro se pueda “enseñar” al sistema inmune a luchar frente a las drogas, bloqueándolas, de forma que tras consumir una dosis de una determinada droga, no sintamos NADA.


Michael Owens recibiendo una condecoración.

Sería una vacuna frente al SUBIDÓN, una vacuna que haría que drogarse fuera un acto completamente inútil.

Aunque la estrategia sea noticia esta semana, la idea de usar el sistema inmune para combatir la adicción a ciertas drogas no es nueva. En 1974 en la University of Chicago se consiguió que macacos inmunizados con un compuesto similar a la morfina, disminuyeran el interés de auto-administrarse heroína (1) y el mismo Owens, en 1985, siguió una aproximaciónque le permitió generar anticuerpos que bloqueaban el PCP en cabras (2).

Aun así, se pueden contar con los dedos de las manos las vacunas contra adicciones que están en desarrollo y por supuesto, casi todos los ensayos aún permanecen en modelos animales (salvo un par de ellas, contra la nicotina y cocaína en humanos)

La nicotina es la diana de múltiples farmacéuticas. Novartis ya desarrolla su vacuna, aunque por ahora Nic Vax de Nabi Biopharmaceuticals sólo ha conseguido un 30% de efectividad ( referida a conseguir un número de anticuerpos que produjeran una disminución en el hábito de los enfermos).

Y es que si en las vacunas corrientes luchamos contra una variación enorme entre los sistemas inmunológicos de los distintos pacientes, en este tipo de vacunas tendríamos que añadir la variación psicológica entre pacientes.


Celtic Pharma también tiene dos candidatos, TA-NIC (frente a la nicotina) y TA-CD (frente a la cocaína). La segunda ya ha conseguido anticuerpos suficientes (durante 13 semanas) como para que un consumidor no note nada tras reincidir en su hábito.

Pero todavía no hemos entrado en detalle, ¿como conseguimos producir anticuerpos frente a moléculas pequeñas? La respuesta rápida: Uniéndolas a cosas grandes.

El grupo de Michael Owens empezó con una proteína enorme presente en la sangre de vaca, a la que unieron múltiples moléculas de metanfetamina, usando para pegarlas cadenas de 6 átomos de carbono. Así, generaron un antígeno monstruosamente grande que lo tiene difícil para pasar desapercibido al entrar en nuestro organismo.

Ahora sólo queda que un macrófago detecte la proteína, la fagocite y la presente a los linfocitos. De entre todos los pedazos a los que reducirá a la proteína antes de presentarla, algunos fragmentos serán poco más grandes que la metanfetamina, generándose anticuerpos frente a dicha molécula. Parte de dichos linfocitos se quedarán como linfocitos B de memoria y permanecerán alerta frente a la droga durante mucho tiempo en el organismo.

El gran trabajo desarrollado por Owens es el diseño fino de lo que acabo de contar, cómo optimizar todo el procedimiento para conseguir el mayor número de anticuerpos (lo que se llama título de anticuerpos) y la mayor memoria posible.

Otra estrategia que han probado es desarrollar anticuerpos monoclonales específicos frente a la metanfetamina, purificarlos e inocularlos a pacientes. Pero claro, necesitaríamos casi la misma dosis de anticuerpo que de droga (igual menos) y los pacientes podrían incrementar la dosis tras el bloqueo para sentir lo mismo (aunque Paul Pentel, investigador del proyecto NicVax de la University of Minnesota dice que en modelos animales estas “compensaciones de dosis” no se observan)

Aun así, una dosis de droga puede ser de gramos, y sintetizar tal cantidad de anticuerpos sería carísimo, para una única dosis.

Como véis no se me había ido la olla, y una vez más vemos estrategias inteligentes en el mundo de la biología molecular, con el objetivo de desarrollar soluciones para nuestros grandes males. Ahora quedan muchas cuestiones éticas en el aire y es que si se consigue el objetivo que hoy nos ocupa, muchas personas podrían optar por vacunar a sus hijos, o el estado podría tomar la opción de legislar la vacunación contra las drogas como una solución. El debate está abierto.

Artículo original escrito por Sonicando aquí.


La ley del Efecto: Aquí hay gato encerrado

Si se ha dicho alguna vez que una de las pretensiones de las ciencias naturales es la de formular leyes generales (ej: leyes de la termodinámica), y muchos insistimos en que la Psicología debe ser una ciencia natural, enseguida salta a la vista la escasez de teorías y modelos que en nuestra disciplina han alcanzado ese honorable estatus, el de "ley natural". Una de esas excepciones es la llamada "ley del efecto", formulada por Edward Lee Thorndike, de la cual Héctor ya nos hizo una pequeña presentación en un post previo. Hoy me propongo profundizar en este tema y tratarlo con más detalle.