Desprotegidos

Si yo engaño a alguien con el timo de la estampita pueden denunciarme y tendría que pagar por mis actos. Pero por lo visto, si yo pongo una consulta donde le digo a la gente que le adivino su futuro mirándole a los ojos y le saco los cuartos, no pueden hacerme nada. Lo mismo parece ocurrir si voy diciendo por ahí que puedo curar el cáncer con cánticos y oraciones y me dedico a cobrar por mis consultas.

Si me he animado a escribir este pequeño apunte es porque le he dado últimamente vueltas al asunto y casualmente acabo de encontrarme en Amazings una entrada escrita por el abogado Fernando Frías que me parece interesante. La podéis encontrar aquí.

Saludos