Sí, y de paso haciendo una reflexión de lo que es el estudio del comportamiento. El comportamiento humano es en cierto modo impredecible. No somos todos iguales, y por lo tanto no resulta fácil predecir de forma exacta lo que una persona hará. Sin embargo, eso no quiere decir que no podamos jugar con probabilidades, y conocer lo que es probable que una persona haga. Es más, conocer algunos aspectos que pueden ser comunes a multitud de personas.
Lo cierto, es que a pesar de que somos muy diferentes unos de otros, realmente no lo somos tanto como podemos sospechar en un primer momento. Os propongo una experiencia interesante antes de seguir…
Experiencia
En un lugar donde haya un buen número de personas (50 o más), proponed al grupo que cada uno piense objetos cortantes. Cuantos más se les ocurran mejor, y que los anoten en un papel. Pero a poder ser que den respuestas creativas, originales. Hay que explicar que una respuesta creativa se entiende que es una respuesta única y útil para dar solución a un problema. Dejadles un tiempo. Una vez pasado dicho tiempo preguntad sobre las respuestas y apuntadlo en una pizarra.
Que la gente vaya diciendo sus respuestas. Se puede preguntar a ver quién cree haber dado una respuesta original. Cuando se diga en alto, que se consulte al grupo si alguien más la había pensado. ¿Cuántas respuestas realmente diferentes y únicas hay?
Curiosamente las respuestas que parecen más originales incluso, normalmente ya se le habían ocurrido a alguien más en la sala.
Esto a mucha gente le parece sorprendente, pero es de lo más normal. Al final pensamos todos las mismas cosas en numerosas ocasiones. Y así debe ser para estar adaptados, pensemos que la memoria tiene un papel claramente funcional para nosotros.
Esta interesante experiencia nos muestra una vez más que por más originales y distintos que pensemos que somos al dar respuestas, al tomar decisiones, sin saberlo somos en gran medida como nuestros semejantes.
Conocer algunos aspectos sobre cómo pensamos puede ayudar a los ilusionistas a crear ciertos juegos divertidos. Os voy a proponer algunas experiencias curiosas que estoy seguro que os gustarán. Os voy a proponer que juguéis a ser mentalistas. Pero no mentalistas en plan “farsantes”, sino que hagáis de ilusionistas. Una proposición bien decente y que estoy seguro que no os dejará indiferentes. Pero lo primero, ¿qué es el mentalismo? Uno de los significados que tiene dicha palabra hace referencia a un género dentro del ilusionismo, al igual que la magia con cartas por ejemplo (cartomagia) o la magia con monedas.
¿Y en qué consiste el mentalismo? Consiste en hacer un juego de magia mediante el cual se simula que uno tiene “habilidades mentales” que realmente no posee, pero se hace con el propósito de entretener a una audiencia, dando a entender que se trata de espectáculo y no de habilidades reales. Al igual que el resto del ilusionismo, en el mentalismo se tienen presentes aspectos sobre psicología. Y de especial manera se usan algunas cosas.
No esperéis grandes revelaciones sobre mentalismo, porque no es este un blog sobre ilusionismo. Juegos de mentalismo pueden ser por ejemplo adivinar lo que alguien está pensando o parar un reloj con el poder de la mente para que nos pongamos en situación. Es decir, como Patrick Jane en los mejores capítulos.
Pero volvamos a jugar a ser Patrick Jane, el protagonista de la serie “El Mentalista”. Podemos jugar a adivinar lo que otros piensan, seguro que os resultará divertido. Ahí van un par de preguntas para responder por vosotros mismos que luego podréis usar con los demás.
Piensa en…
Amigo lector, te invito a hacer esta experiencia. Consiste en algo muy sencillo. Piensa en una fecha, la que tú quieras. ¿La has pensado? Si eres lector habitual de psicoteca supongo que ya sabrás por dónde van los tiros, pero bueno.
Vamos con la siguiente cuestión, que es nueva para mí. ¿Cuál es tú color preferido? Intentaré adivinarlo también.
La fecha en la que has pensado amigo lector es la fecha de tu cumpleaños. Tu color preferido es el color azul.
¿He acertado? En lo de la fecha estoy casi seguro de que sí, sin embargo en el color puede que no. Si el azul no es tu color preferido déjame otra oportunidad. ¿Es el verde? Ahora sí, ¿verdad? Si no lo es déjame una tercera…¿es el rojo?
Es que el otro día leí que la mayoría de las personas tienen como color preferido el azul (casi un 50%), seguido del verde en segundo lugar y del rojo en tercer lugar. Yo que me creía muy especial cuando decía que mi color preferido es el azul y mi segundo color el verde…¿puedo ser más convencional? Jajajaja.
Este tipo de información puede servir a un mentalista-ilusionista (y a un estafador también), para hacernos creer que conoce cosas sobre nosotros. Y sino ahí está el Efecto Forer para ayudar, o artimañas de diferente pelaje de todo tipo y color. Por supuesto que existen multitud de estrategias que pueden llevar a que lo imposible parezca posible. Os dejo con un vídeo que encontré en youtube y que puede ser un buen ejemplo de lo que comento…
Los ilusionistas son capaces de las cosas más sorprendentes...valiéndose de estrategias diversas
Hay una cosa que suelen preguntar los magos en plan broma…y que os pregunto yo ahora. ¿Sabéis lo que estoy pensando? Anotad la respuesta en un papel. Pensad en ella.
Bueno lo que estoy pensando es NO, si habéis respondido eso, habéis adivinado lo que estaba pensando :D Pueden parecer estos últimos juegos inocentes y sin sentido, pero si se le dan las suficientes vueltas sirven para entender bastante bien en qué consiste esto de la psicología.¿Somos todos exactamente iguales? No. ¿Se puede estudiar al ser humano? Sí. Y sobre todo…si alguien nos muestra sus poderes mentales…¿debemos pensar que son reales? No.
Os dejo con otro vídeo de un conocido mentalista, Anthony Blake…Que lo disfrutéis…
Y este otro…pero eso sí, no hagáis caso de nada de lo que dice, por mucho que hable de la comunicación no verbal y demás. Es espectáculo…