Elecciones

Tras un recuento electoral, sólo importa quién es el ganador. Todos los demás son perdedores. Saludos.



Ha pasado ya mucho tiempo desde mi última entrada, pero asuntos universitarios no me han permitido actualizar el blog tanto como me hubiera gustado. De todas formas, aquí estamos de nuevo.

Normalmente meses antes de unas elecciones, ya empieza a haber multitud de habladurías acerca de que grupo o partido político va a ganar, o cómo serán los resultados. Estas predicciones son fruto de una de las ramas de las matemáticas : La estadística.

Pero ¿cómo se hacen esos sondeos?. Y más aún, ¿Cómo a partir de un sondeo podemos predecir el resultado de una votación?. Además, no es raro ver que cada partido político tiene sus propias estadísticas, en las que suele salir ligéramente beneficiado,luego me surge otra pregunta, ¿Cómo de fiables son estas predicciones?.

Asi, despues de esta breve introducción, pasemos al grueso de la entrada. Empezamos:

La teoría de detección de señales

ResearchBlogging.orgEn el post de hoy me gustaría esbozar una introducción a la teoría de detección de señales, o abreviadamente "TDS", como la encontraréis en muchos sitios. Se trata de una teoría que nos llega de la psicofísica y que tiene ya bastante solera (sus antecedentes clásicos los podéis ver en Swets y Green, 1966, pero hay trabajos aún anteriores a este). En origen, la TDS pretende, nada más y nada menos, que describir formalmente (matemáticamente) la capacidad de un organismo, o de una máquina artificial, para reconocer un estímulo determinado y decidir una respuesta en base a ese reconocimiento.
La TDS, como es lógico, se ha utilizado profusamente en la psicología (recientemente, por ejemplo, se ha propuesto como paradigma en el estudio de percepción de contingencias: Allan, Siegel y Tangen, 2005), pero también se ha aplicado en muchos otros campos, como la inteligencia artificial y la medicina (en oftalmología tiene cierta tradición), y algunos de sus aspectos todavía están presentes en la ingeniería aplicada (las curvas ROC que se usan en el desarrollo y evaluación de los sistemas de control de calidad y que luego mencionaremos). Aunque se trata de una teoría con evidente despliegue matemático, creo que, siempre y cuando me las arregle para evitar fórmulas matemáticas y rodear ciertos argumentos técnicos, es un tema razonablemente accesible incluso para los profanos en la materia. Así que me voy a atrever a haceros esta introducción, con la que espero no ser mucho más tedioso que de costumbre.

Escribir el libro ideal: pinitos empíricos

Hace tiempo hice un trabajo interesante sobre gustos de lectura, o mejor dicho sobre qué ingredientes tendría que tener una historia escrita para gustar al lector. Pregunta complicada dada la variedad de gustos existente. El trabajo se centró en la novela.


Lo acabo de rescatar del armario y he pensado hacer un pequeño apunte sobre el tema antes de que el trabajo se pierda en la profundidad del oscuro armario.
Antes que nada hay que decir que es un trabajo no muy serio, con muchos fallos. Fue parte de un trabajo de clase para una asignatura. Aunque me lo tomé bastante en serio, está lleno de fallos. Para empezar tiene un error del 13 %, preguntas que podrían haberse hecho mejor, una muestra no representativa de la población general (estudiantes universitarios, aunque las conclusiones hacían referencia solamente a dicho colectivo)…
Y diréis, si está tan mal hecho, ¿para qué nos lo pones? Bueno, yo creo que tan mal como para que no sea interesante conocer los resultados tampoco. Os comento un poco acerca del mismo, y así quien quiera puede opinar sobre qué le parecen dichos resultados. Además, sino se iba a perder en el armario con el tiempo, así por lo menos lo comparto con vosotros.

¿Qué es lo que hice?
Primero “secuestré” a un grupo de estudiantes universitarios de su clase, e hice un estudio cualitativo sobre sus gustos de lectura. Usé una entrevista de grupo, que por cierto, todavía tengo grabada. En base a la información que conseguí, diseñé unos cuestionarios, y tras hacer un pequeño test y unas modificaciones en los mismos tras la prueba, se los pasé a 60 personas. Por lo que el tamaño muestral era de 60.

¿Qué conclusiones salen?
El primer dato hace referencia no tanto a los gustos sino a la longitud del libro, y parece que una gran mayoría tenía preferencia por una longitud que estuviera entre las 200 y las 300 páginas. En concreto la mitad de la gente escogía esta opción frente a otras de mayor o menor longitud.
En cuanto gustos, parece ser que un ingrediente especialmente valorado es la intriga bien conseguida. Es valorado el libro sobre temas intrigantes y misteriosos que susciten especialmente la curiosidad del lector.
Haciendo referencia a los protagonistas de una historia, parece ser que hay cierta tendencia a querer que dicho protagonista sea una persona con cierta similitud en ciertos aspectos, con la que uno o una se pueda identificar.
En cuanto al lugar físico en que discurre la historia, parece ser que hay una abrumadora preferencia por la variedad de lugares (87 %). Es decir, que nada de que la historia tenga como escenario un único lugar, sino mucho mejor cierto movimiento del protagonista por varios escenarios distintos.
El lugar además se pide que sea un lugar real. Es decir que los lectores prefieren una novela que supuestamente ocurre en por ejemplo Londres, que en el lugar “imaginario X”. Hay también una preferencia por los espacios urbanos frente a otros, como espacios naturales (90%). En cambio unos prefieren pueblos y otros más ciudades.
En el relato, se valora por lo visto también bastante la aparición de momentos en los que a los protagonistas les ocurren cosas importantes y manifiestan sentimientos intensos.
Al analizar las tablas de contingencia se aprecia que hay una cierta relación entre elegir el misterio como ingrediente fundamental y querer que el relato transcurra en diferentes lugares y en que sean lugares reales (no imaginarios).

Conclusión
Parece ser que una orientación acertada podría consistir en escribir una historia de misterio, bien redactada para intrigar al lector, ubicada en varios emplazamientos reales, con gran presencia de cascos urbanos.
Además conviene que el protagonista sea alguien con quien uno se pueda identificar, y que existan momentos en que el protagonista manifieste emociones intensas ante los acontecimientos. La extensión idónea entre 200 y 300 páginas.
¿Qué os parecen las conclusiones? ¿Estáis de acuerdo? Y si no es así…habladme de vuestros gustos…
Fuente de la imagen

¿Qué es la psicología?

Hace poco en una de las últimas entradas apareció la idea de plantear definiciones sobre lo que es la psicología. Creo esta entrada para eso, y está abierta a las propuestas, a ver qué definición pensáis vosotros que es la más correcta. De momento hay dos, podéis ir poniendo en comentarios las vuestras...

Vamos primero con la definición que daba el RAE...

3. f. Ciencia que estudia los procesos mentales en personas y en animales.

Y esta otra es la reflexión que hacía nuestro amigo Jesús...

"Ya que lo preguntas, yo definiría la Psicología como “ciencia de la conducta”. Y después tendría que definir la conducta como “cualquier cosa que haga un organismo en relación con su entorno”, matizando que la conducta puede ser simple o compleja, pública o privada, innata o aprendida en distintos grados, etc. En resumen, una definición de conducta que permite abordar también lo que tradicionalmente se etiqueta como “mental” o “espiritual” sin caer en el dualismo."

¿Y las vuestras?

Mitos y memoria de los peces

Suele decirse que los peces sólo tienen 3 segundos de memoria. Un experimento casero muy interesante sobre el tema, que por lo visto han debido de hacer un grupo de estudiantes de un instituto como trabajo, bajo la tutela de su profesor. Los peces negros ya habían aprendido el camino hacia la comida antes de la prueba...



Vía Ciencia en el XXI.

Mente sana en cuerpo sano

El ejercicio físico practicado con moderación es bueno para la salud. Tiene muchos beneficios. En pocas cosas se ponen tan de acuerdo todos los expertos, y es que hacer deporte es una de las terapias más baratas en relación a la enorme cantidad de beneficios que tiene.


Hace bien poco leía una entrada en la lógica del titiritero, donde comentaban cómo el ejercicio físico mejora la esperanza y la calidad de vida a partir de los 50. Hay numerosas evidencias que informan sobre los beneficios del ejercicio físico moderado, y de hecho es bastante conocido por todo el mundo eso de que “el deporte con moderación es bueno”.
Ahora bien, algo menos conocido es el beneficio que el ejercicio físico tiene a nivel psicológico. Sí, y es que parece que eso de “mente sana en cuerpo sano” se cumple en cierto sentido. Y es que el deporte ayuda a mantener nuestra mente en forma. Hay muchos estudios que hablan sobre el tema.
Echad un vistazo a éste por ejemplo, que encuentra beneficios cognitivos del ejercicio en niños, en pruebas de atención y en tareas como la lectura, ejercicio de las matemáticas y la ortografía.
Podemos encontrar otro estudio interesante sobre el tema aquí, esta vez con personas mayores, centrado en los beneficios de un ejercicio de fuerza sobre la memoria auditiva, discriminación perceptual y el tiempo de reacción.
Y es que parece que el ejercicio físico tiene ciertos efectos en el cerebro, entre otros provoca neurogénesis en el hipocampo, estructura que tiene especial importancia en el funcionamiento de la memoria. Hay numerosas evidencias que nos lo muestran, sin embargo no se conocía bien cómo ocurría de forma más detallada. Un nuevo estudio sin embargo nos lo muestra. Y es que parece que por lo menos en ratones, el ejercicio físico aumenta un 200 % la producción de nuevas células madre en el cerebro, y consigue que las que mueren, no lo hagan tan deprisa. Podemos encontrar el abstract del trabajo aquí.
Y hacer deporte no sólo ayuda a mantener algunas capacidades cognitivas, sino que también parece que ayuda a evitar algunos problemas psicológicos. Podemos encontrar un trabajo aquí, que nos muestra los posibles beneficios del deporte frente a algunos problemas psicológicos como el estrés. Podemos encontrar otro trabajo aquí, que apunta en la misma dirección.
Quien sabe, tal vez en un futuro, junto con las terapias psicológicas actuales se incluya una tabla de ejercicios…

Fuente de la imagen

Ciencia cognitiva y enseñanza de la física

Hoy un artículo que ha sido escrito por el premio Nobel de Física Carl Wieman, y que trata sobre Ciencia Cognitiva. En concreto sobre las tendencias pedagógicas en la enseñanza de la física. Así que sin más, os dejo con el artículo. Espero que os guste...

Una aproximación científica a la educación científica-Reducir la carga cognitiva

Los científicos cognitivos han pasado una gran cantidad de tiempo estudiando lo que constituye la competencia experta en una disciplina, y han llegado a unos componentes básicos.

Lo primero es que los expertos tienen una gran cantidad de conocimientos factuales sobre su materia, pero esto no es una sorpresa. Pero además, los expertos tienen una estructura de organización mental que facilita la recuperación y aplicación efectiva de su conocimiento. Tercero, los expertos tienen una capacidad para monitorizar su propio pensamiento (“metacognición”), al menos en la disciplina de la que son expertos. Son capaces de preguntarse a sí mismos, “¿Comprendo esto? ¿Cómo puedo comprobar mi conocimiento?”

Un profesor de ciencia tradicional se concentra en enseñar los conocimientos factuales, con la suposición implícita de que las formas de pensamiento similares a las del experto sobre el tema llegarán libremente o ya están presentes. Pero esto no es lo que nos dice la ciencia cognitiva. En lugar de esto nos dice que los estudiantes tienen que desarrollar estas formas distintas de pensamiento a través de un esfuerzo mental extendido y focalizado. Además, las nuevas formas de pensamiento siempre se construyen sobre el pensamiento anterior del individuo, por lo que si el proceso educativo quiere tener éxito, es esencial tener en cuenta este pensamiento previo.

Esto es biología básica. Todo lo que constituye “comprender” la ciencia y “pensar científicamente” reside en la memoria a largo plazo, la cual se desarrolla a través de la construcción y ensamblaje de las proteínas componentes. Por lo que una persona que no pasa por este proceso de construcción mental extendido simplemente no puede lograr el dominio de un tema.

Cuando comprendes lo que conforma la competencia experta y cómo se desarrolla, puedes ver cómo cuenta la ciencia cognitiva para los resultados de clase que presenté anteriormente. Los estudiantes no están aprendiendo los conceptos científicos que permiten a los expertos organizar y aplicar la información a la disciplina, ni se les está ayudando a que desarrollen las estructuras organizativas mentales para recuperar y aplicar tal conocimiento ni la capacidad de metacognición. Por lo que tiene mucho sentido que no estén aprendiendo a pensar como expertos, incluso aunque estén aprobando los cursos de ciencia memorizando hechos y recetas de resolución de problemas.

Enseñanza y aprendizaje mejorados

Si ahora volvemos al misterio de mis estudiantes graduados — por qué sus primeros 17 años de enseñanza parecía tan poco efectivos, mientras que unos pocos años haciendo investigación convertía estudiantes graduados en físicos expertos — vemos que la primera parte del misterio está resuelta: Esos cursos de ciencia tradicionales hacía poco por desarrollar un pensamiento experto sobre la física.

Pero, ¿por qué es tan diferente trabajar en un laboratorio?

Una gran cantidad de investigación cognitiva y educativa puede reducirse a este principio básico: La gente aprende creando su propia comprensión. Pero eso no significa que deban, o incluso puedan, hacerlo sin ayuda. Una enseñanza efectiva facilita tal creación logrando que los estudiantes se sumerjan en una profunda reflexión sobre el tema en un nivel apropiado y luego monitorizar esa reflexión y guiarlo para que sea más similar a la del experto.

Cuando lo pones en estos términos, te das cuenta de que esto es exactamente lo que todos mis estudiantes graduados están haciendo 18 o 20 horas al día, siete días a la semana. (O al menos eso es lo que afirman — la realidad es que es un poco menos). Se centran atentamente el resolver problemas reales de física, y regularmente estudio cómo piensan y les doy guía para que se hagan más expertos. Tras unos pocos años en ese entorno, se convierten en expertos, no debido a que haya algo mágico en el aire del laboratorio, sino porque están implicados en el proceso cognitivo exacto que se requiere para desarrollar una competencia experta.

Una vez me di cuenta de esto, empecé a pensar cómo podrían usarse estas ideas para mejorar la enseñanza de ciencia a los no graduados. Por supuesto sería muy efectivo poner a todos los estudiantes en un laboratorio de investigación a trabajar mano a mano con un miembro del profesorado en lugar de asistir a clases. Aunque probablemente esto funcionaría perfectamente y no es muy diferente de mi propia educación, obviamente no es una solución práctica que se pueda implantar a nivel global.

Entonces, si la realidad económica dicta que tenemos que usas cursos y clases, ¿cómo podemos usar estas ideas para mejorar la enseñanza en clase?

La clave es lograr las actividades cognitivas deseadas, tal y como se revela en la investigación, en actividades normales del curso.

No estoy sólo en esta conclusión. Existe una significativa comunidad de investigadores de la educación científica, particularmente en física, que están tomando esta aproximación para la prueba y desarrollo de nuevas aproximaciones pedagógicas. Esto está dando resultados en una clara demostración de un aprendizaje mejorado. Es más, algunas nuevas estrategias pedagógicas innovadoras están lo bastante maduras para haberse aplicado de forma rutinaria por parte de otros profesores con resultados similares.

Entonces, ¿cuáles son algunos ejemplos de estas estrategias, y cómo reflejan nuestra incrementada comprensión de la cognición?

Reducir la carga cognitiva

La primera forma que podemos usar la investigación en la enseñanza para crear mejores prácticas de clase aborda la capacidad limitada de la memoria a corto plazo. Todo lo que se debe hacer es reducir la carga cognitiva para mejorar el aprendizaje. El profesor efectivo reconoce que dar a los estudiantes material para aprender es el equivalente mental a darles paquetes para transportar.

Con sólo un paquete, pueden hacer un gran progreso rápidamente. Si se les carga con muchos, irán tambaleándose, tendrán más problemas y no llegarán tan lejos. Y cuando experimentan el equivalente mental de tener muchos paquetes sobre ellos ala vez, quedan abrumados y no pueden aprender nada.

Por lo que lo que debe hacer cualquier profesor es reducir la carga cognitiva mientras presenta el material que les ayudará. Hay algunas formas obvias de hacer esto, tales como hacerlo más lento. Otros incluyen tener una organización clara, lógica y explícita de la clase (incluyendo hacer conexiones entre las distintas ideas presentadas y conexiones con cosas que los estudiantes ya conocen), usar figuras cuando se apropiado en lugar de depender exclusivamente de descripciones verbales y minimizar el uso de jerga técnica. Todas estas cosas reducen la demanda cognitiva innecesaria y dan como resultado un mayor aprendizaje.

En la Parte 4 abordaremos las creencias, el pensamiento guiado y la tecnología.

Tercera parte de la saga sobre educación científica. Artículo anterior Una aproximación científica a la educación científica – Investigar sobre el aprendizaje


Referencias:

W. Adams et al. (2005), Proceedings of the 2004 Physics Education Research Conference, J. Marx, P, Heron, S. Franklin, eds., American Institute of Physics, Melville, NY, p. 45.
R. Hake (1998), The American Journal of Physics. 66, 64.
D. Hammer (1997), Cognition and Instruction. 15, 485.
D. Hestenes, M. Wells, G. Swackhammer (1992), The Physics Teacher. 30, 141.
Z. Hrepic, D. Zollman, N. Rebello. “Comparing students’and experts’ understanding of the content of a lecture,” to be published in Journal of Science Education and Technology. A pre-print is available at http://web.phys.ksu.edu/papers/2006/Hrepic_comparing.pdf
E. Mazur (1997), Peer Instructions: A User’s Manual, Prentice Hall, Upper Saddle River, NJ.
G. Novak, E. Patterson, A.Gavrin, and W. Christian (1999), Just-in-Time Teaching: Blending Active Learning with Web Technology, Prentice Hall, Upper Saddle River, NJ.
K. Perkins et al. (2005), Proceedings of the 2004 Physics Education Research Conference, J. Marx, P. Heron, S. Franklin, eds., American Institute of Physics, Melville, NY, p. 61.
E. Redish (2003), Teaching Physics with the Physics Suite, Wiley, Hoboken, NJ.

Autor: Carl Wieman
Fecha Original: 23 de marzo de 2009
Enlace Original

Traducción gracias a Kanijo en Ciencia Kanija.

Este artículo se encuentra bajo una licencia Creative Commons 3.0